Versátil y ecológico

Plástico de cáñamo

Quizás lo más interesante del cáñamo industrial, especialmente cuando se le compara con árboles u otros cultivos de fibra, es su extraordinaria versatilidad. Se ha utilizado para fabricar miles de productos diferentes.

Además, el cáñamo es también un cultivo excepcionalmente respetuoso con el medio ambiente que no necesita herbicidas ni fertilizantes artificiales para florecer. Su olor repele a insectos y plagas, lo que significa que las plantas tampoco necesitan pesticidas. Los productos fabricados exclusivamente con cáñamo no contienen sustancias químicas nocivas. En resumen, la planta es de un valor inestimable para un futuro sostenible.

El plástico de cáñamo nos remite a un material del futuro: un sustituto potencial de muchos plásticos petroquímicos, ligero, duradero y biodegradable, cuya producción es mucho menos dañina para el medio ambiente. Sin embargo, en realidad el plástico de cáñamo no es una novedad dentro del abanico de aplicaciones del cáñamo industrial. Los primeros plásticos ya utilizaban el cáñamo como componente por sus altos niveles de celulosa, la sustancia de que están hechas las paredes de las células vegetales. Este tipo de plásticos son ahora conocidos como ‘bioplásticos’ para distinguirlos de aquellos derivados de materiales basados en productos petroquímicos. 

Para ver en nuestros museos

Actualmente, la cantidad de productos de plástico de cáñamo disponibles comercialmente es todavía algo limitada, sobre todo debido a las restricciones vigentes sobre el cultivo del cáñamo en la mayor parte del mundo. No obstante, algunas empresas están comercializando motos, artículos electrónicos, sillas de diseño e incluso instrumentos musicales hechos de plástico de cáñamo. El Hash Marihuana & Hemp Museum exhibe una selección de productos hechos de plástico de cáñamo, desde un didjeridoo hasta una silla de un tren subterráneo. Uno de los destacados de la colección es una guitarra con el cuerpo hecho íntegramente de plástico de cáñamo.