Historia del uso del cannabis en Europa
Los coffeeshops del Siglo de Oro
Poco después de que Colon descubriera América en 1492, Europa entró en contacto con la tradición de fumar tabaco en pipas ceremoniales. Al cabo de poco tiempo, los europeos comenzaron a experimentar con el objetivo de mejorar el sabor del tabaco y aumentar el placer de fumar. Uno de los experimentos consistió en añadir hierbas al tabaco, como por ejemplo el cáñamo, una planta barata y que se podía conseguir en cualquier parte, ya que se cultivaba para usos domésticos e industriales. Y si no, siempre podía comprarse picadura en el lugar apropiado: por ejemplo, en los inventarios de los vendedores de tabaco se mencionan con bastante frecuencia partidas de cáñamo.
Así, después de un arduo día de trabajo, los fumadores podían dejarse llevar por una agradable embriaguez. Fumar, beber, cantar, rr de fiesta…Para divertirse y quizá también para inspirarse. Navegantes, soldados y artistas difundieron la costumbre de fumar cáñamo y tabaco, costumbre que se convirtió en un popular pasatiempo entre todos los rangos y clases sociales. Los antiguos maestros reflejaron con gran expresividad estos cotidianos placeres de la vida y pintaron, una y otra vez, a figuras disfrutando de su pipa en los fumaderos, los coffeshops del Siglo de Oro.
En el siglo XVII, fumar no era una costumbre generalmente aceptada, pues iba en contra de los dictados de la moral cristiana. Así pues, las escenas reflejadas en los cuadros no mostraban conductas dignas de imitación, sino algo que no estaba permitido. En efecto, este tipo de pinturas servía también para reforzar la moral. No eran «retratos» de la vida cotidiana, sino obras que mostraban a la gente buenos y malos comportamientos.
Para ver en nuestros museos
En la colección del museo hay trabajos de famosos pintores del siglo XVII como David Teniers el Joven, Adriaen Brouwer, Hendrick Sorgh y Adriaen van Ostade: obras que están al mismo nivel que otros cuadros de estos artistas, que cuelgan, por ejemplo, en el Rijksmuseum, el Museo Nacional de los Países Bajos.
En el Hash Marihuana & Hemp Museum de Barcelona, estas obras maestras están expuestas en una majestuosa sala, mientras que en el Hash Marihuana & Hemp Museum de Ámsterdam se muestran en un entorno más íntimo, lo que invita a contemplarlas muy de cerca. Estos cuadros reflejan un periodo muy especial en la historia del consumo del cannabis.